martes, 27 de enero de 2009

Esa pequeña tristeza

Hay días buenos o malos, días divertidos o monótonos, días para recordar u olvidar. Pero indiferente a todos ellos se encuentra esa pequeña tristeza. Ese sentimiento, que nos asalta en cualquier lugar, momento o circunstancia y se adhiere a nuestro espíritu, lastrando nuestros ánimos, robando nuestra alegría… hundiéndonos en una extraña depresión.
No se suele prolongar durante mucho tiempo y lo más peculiar no viene a ser su repentina aparición, si no la imposibilidad de encontrar una causa o razón que la justifique, escapando a toda lógica.

Es como si la pena destinada a otra persona equivocase el rumbo para acabar tropezando con nosotros, derribando nuestra voluntad para ser felices.
Powered By Blogger